
LA MENTIRA COMO OPOSICIÓN
- Manuel Beltran
- 14 ene 2023
- 5 Min. de lectura
Actualizado: 15 ene 2023
¿Por qué los medios en Colombia son capaces de inventar que el papá del presidente, de 87 años y recién enviudado, tiene una novia con cargo diplomático en España?
Todo tiene una explicación histórica.
En la película La estrategia del caracol, del actual embajador en China, Sergio Cabrera, el personaje Gustavo Calle Isaza (interpretado por Luis Fernando Múnera y quien hace las veces de narrador) le comenta a una periodista que a su pueblo lo mató un rumor en época de La Violencia. Todos creían que habría de llegar un militar pacificador que acabaría con el pueblo. Los liberales creían que era conservador y estos, que era liberal. Al final, todos se desplazaron por el terror y el pueblo quedó abandonado. El militar nunca llegó. García Márquez ya había tratado este asunto en su novela La mala hora, en la que se presenta cómo los rumores y chismes sobre la vida de los habitantes, a través de pasquines y panfletos, propagaron la guerra civil en este mismo periodo de nuestra historia nacional. También es la época del "ahí viene la chusma o los pájaros o los chulavitas. La Violencia es un periodo histórico que demuestra la importancia que tiene el rumor y el chisme como arma política. Cientos de miles fueron desplazados a la ciudad con el solo rumor de la llegada de bandoleros o militares encargados. La oligarquía se impuso así sobre el pueblo que se había rebelado en época de Gaitán. El rumor y el chisme se convirtieron en propaganda y medio de dominación. Al final, el país fue sometido a la guerra y por décadas le ha sido imposible salir de esta lógica perversa. Por eso, ahora que está en la oposición al gobierno de Petro, esta oligarquía ha convertido la mentira, el chisme, los rumores, en su principal método para sabotear el cambio social, político y económico del país. Este análisis permite comprender por qué razón los medios de esa oligarquía no tienen reparos en inventar cualquier mentira para destruir al gobierno popular.
El caso más reciente de este modus operandi ha sido la calumnia lanzada contra el progenitor del presidente de la República. Cambio, un pasquín de la oligarquía liberal, se inventó que el gobierno había nombrado a la supuesta novia del padre del presidente como diplomática en España. El propósito de este ataque tan miserable salta a la vista: presentar al ejecutivo como corrupto, que trafica con influencias y que, por supuesto, no representa el cambio en el país. Buscan desestabilizar al gobierno y poner a la población en su contra, que obviamente se indignaría ante un hecho semejante. Sin embargo, la mentira fue tan burda, que terminó cayendo por su propio peso. Resultó que el señor tiene 87 años y su esposa murió hace dos meses. La supuesta novia no existía. También calumniaron a una mujer que no tenía nada que ver con él. Al final tuvieron que retractarse y pedir disculpas, aunque todos sabemos que seguirán lanzando este tipo de mentiras, disfrazadas de periodismo. Lo que buscan en el fondo es llevar al país al enfrentamiento, volver a dominar en la guerra que siempre arman a punta de mentiras, noticias falsas y rumores sin confirmar. Dominaron por 200 años con este tipo de estrategias y hoy las usan para volver al poder. Al igual que la guerra, los golpes de Estado empiezan mucho antes de su concreción con este tipo de embustes que buscan minar la imagen del mandatario. Pero ya sabemos cómo acaba esto por la carnicería que están llevando a cabo los golpistas en Perú.
El país está frente a una oposición desesperada por encontrar un "triunfo" frente al gobierno, pues sabe que el ejecutivo lo está haciendo muy bien y cada día se consolida más. La oposición no ha podido frenar ninguna reforma, no ha tumbado a ningún funcionario, ni ha sido capaz de reducir el respaldo ciudadano al ejecutivo. Por eso miente sin parar. La oposición no encuentra qué puede desestabilizar o tan siquiera debilitar al gobierno, por lo que tiene que inventar patrañas que se caen fácilmente y terminan fortaleciéndolo. Han llegado al punto de inventarse renuncias de funcionarios para consolar a sus adeptos y desgastar a Petro y sus ministros así sea una ficción. Por ejemplo: esta semana se inventaron que la viceministra de energía había renunciado por peleas con la ministra y que el ministerio estaba desbaratado. Llegaron hasta comparar los estudios de cada una, para ponerse del lado de la saliente viceministra. Resultó que todo era mentira. La funcionaria nunca renunció, la supuesta pelea no existió y todo seguía funcionando con normalidad en esa cartera. Como es evidente, el objetivo no era más que desprestigiar a la ministra y desgastar la imagen del gobierno. Nuevamente, les salió mal.
Utilizar la mentira como método de oposición significa poner en práctica las teorías nazis de manipulación. Mentir y mentir, que algo quedará. Otro caso grave que aconteció esta semana fue el modo en que se abordó el abuso sexual contra menores de edad en años anteriores por parte de militares, algunos estadounidenses, en el Guaviare. Los medios quisieron presentarlo como un argumento para expulsar a la directora del ICBF, pues ella resultaba la culpable de todo. Lo curioso es que no pedían castigo para los abusadores y que no existiera inmunidad para los soldados de EEUU. Convirtieron aberrantes crímenes contra infantes en una oportunidad para tumbar a una funcionaria del gobierno, a la que perciben como el eslabón más débil y a la que las bases no respaldarían. Sin embargo, esta instrumentalización de los niños cada día es más evidente, por lo que funciona menos a medida que se emplea. Esta tal vez sea una de las características más importantes de esta estrategia: manipular la indignación de la población con rumores, para que la sociedad haga lo que los grandes medios y sus dueños se les antoje. Este poder mediático se traduce en poder político en nuestro país. De allí la oposición de los medios a la reforma política y del porqué han lanzado decenas de mentiras contra dicha iniciativa.
La reforma política plantea listas cerradas y financiación 100% del Estado. Estas dos propuestas son suficientes para romper ese poder político que tienen los medios y los monopolios económicos que están detrás de ellos. Ya no podrán financiar las campañas de sus candidatos ni hacer la misma publicidad en televisión, radio e internet para promoverlos. La lista cerrada prioriza al colectivo, por lo que los influencers, inflados por los poderes mediáticos, serán relegados. Si apreciamos la actualidad del congreso, podemos entender cuál es la razón del desespero por tumbar la reforma. La bancada de oposición es la de los influencers y políticos tradicionales que los medios validan y promocionan. Desde los uribistas más rancios, de paso por los tibios más extremistas, hasta los esquiroles de falsa izquierda, todos tienen el aval de los grupos económicos que controlan la información, además de financiar directamente sus campañas. Obviamente, esta gente va a legislar a favor de sus mecenas, no del pueblo. Y lo peor de todo, usurpan el espacio que deberían tener verdaderos representantes del pueblo, que solo pueden vencer este cerco político y mediático mediante el poder colectivo de la lista cerrada. Así que vencer las mentiras de la oposición sobre la reforma es el paso fundamental para aprobarla, como ha pasado con las demás.
Nota: En torno a los procesos de Paz Total y negociaciones con cualquier grupo armado, hay que desconfiar de todo lo que digan los medios. La oligarquía, propietaria de esos medios, hará todo lo posible por evitar que el país supere la guerra.
Manuel Beltrán.
Lo felicito, es usted un gran analista.
Continue por favor en su buena y profunda labor.
Lo necesitamos.